Enaire sufri el fallo de energa y el corte de suministro que garantiza la comunicacin entre controladores y pilotos. Las torres de control pudieron seguir gestionando vuelos con el aporte de electricidad y de datos cados gracias a un sistema de contingencia, que permite que si esto ocurre pueda continuar operando.
Desde que ocurri el apagn a las 12:30 horas del da mencionado y hasta la madrugada de la jornada siguiente, hubo un brillante trabajo para proporcionar capacidad al 100 por ciento. La empresa pblica Enaire se vio doblemente impactada, pues, por un lado, sufri el fallo de energa y, por otro, el corte de suministro de los operadores de telecomunicaciones, fundamental para enlazar con un avin que est volando.
Para el primer problema, los centros de control se apoyaron en sistemas de energa redundantes mediante generadores basados en grupos electrgenos previstos para este tipo de incidencias, que tienen una autonoma de hasta cuatro das, margen de tiempo suficiente para procurar de manera indefinida el suministro de combustible que les permite funcionar. El segundo es ms complicado, ya que el apagn afect a los medios de enlace entre los radares y emisores de comunicaciones con los centros que facilitan los proveedores, Telefnica y Evolutio. La provisin de voz y datos que los sustenta se vio afectada.
La monitorizacin en tiempo real para saber dnde se caa el servicio o dnde haca falta un tcnico fue fundamental, a travs del comit de crisis de Enaire, en coordinacin con Eurocontrol, Aena y las compaas areas. Se decidi que para mitigar el impacto se adoptaran diferentes medidas de control de afluencia, con restricciones preventivas en la capacidad, permitiendo que fuera segura, criterio que siempre prevalece en todas las actuaciones del transporte areo. Por su parte, Aena tambin activ sus comits de crisis en todos los aeropuertos, que siguieron operando gracias a sus respectivos grupos electrgenos de contingencia.
Las principales incidencias fueron por motivos externos y se produjeron en los s a los aeropuertos debido a los problemas del transporte pblico y privado, que se sumaron a las naturales regulaciones de Enaire. Sobre las pernoctaciones en las terminales por los vuelos cancelados, no hubo grandes aglomeraciones y los servicios que los aeropuertos prestan a los pasajeros funcionaron correctamente.
El funcionamiento en red de los aeropuertos en Espaa demostr su robustez y eficacia, porque contribuy a mantenerlos operativos. Y es aqu donde se ve el trabajo de decenios que ha hecho que nuestras infraestructuras aeronuticas estn preparadas para todo y ante cualquier circunstancia. Hay que felicitar a AENA, Enaire y a las empresas por la magnfica labor que realizaron ese dramtico da.
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